Un grupo de músicos encabezados por Juan Lomán y Bueno, llevó Mañanitas al general Adalberto Tejeda, gobernador de Veracruz, en su residencia oficial en la capital del estado. Siendo también músico (tocaba violonchelo), el mandatario se entusiasmó con la ejecución de quienes lo festejaban. El buen convivio hizo que Lomán diera el paso con una petición particular: querían formar una agrupación de altura que no existía en México. Era un empresa de grandes miras, pero tenían la capacidad y, si contaban con el apoyo oficial, podrían alcanzar la meta. Tejeda lo pensó poco antes de dar su venia para júbilo de los músicos. Fue el primer paso en el nacimiento de la Orquesta Sinfónica de Xalapa (OSX), la más antigua del país.