Por ANDREW DALTON y LARRY NEUMEISTER Associated Press
NUEVA YORK (AP) — Un juicio que enfrenta a “Thinking Out Loud” de Ed Sheeran con “Let’s Get It On” de Marvin Gaye comenzará el lunes con su selección de jurado y declaraciones de apertura.
Los herederos de Ed Townsend, coautor con Gaye del tema de clásico del soul de 1973, demandaron a Sheeran, alegando que la exitosa canción del astro británico pop de 2014 tiene “sorprendentes similitudes” con “Let’s Get It On” y “elementos comunes evidentes” que violan sus derechos de autor.
La demanda presentada en 2017 finalmente comenzará su juicio que se espera dure una semana en una corte federal de Manhattan presidida por el juez Louis L. Stanton de 95 años.
Sheeran, de 32 años, es uno de los testigos que se espera que declaren.
“Let’s Get It On” de ritmo lento y sensual se ha escuchado en innumerables películas y comerciales y ha sido reproducida millones de veces en los últimos 50 años. “Thinking Out Loud”, que ganó un Grammy la canción del año, es una versión mucho más directa sobre el amor y el sexo.
Si bien el jurado escuchará las grabaciones de ambas canciones, probablemente muchas veces, sus letras y espíritu son irrelevantes para el juicio. Se supone que los miembros del jurado sólo deben considerar los elementos en bruto de la melodía, la armonía y el ritmo de la composición de “Let’s Get It On”, como se documenta en la partitura presentada ante la Oficina de Patentes y Marcas Registradas de Estados Unidos.
Los abogados de Sheeran han argumentado que el innegable parecido estructural de las canciones apunta sólo a los cimientos de la música pop.
“Las dos canciones comparten versiones de una progresión de acordes similar que no se puede proteger y estaba disponible gratuitamente para todos los compositores”, dijeron en un expediente judicial.
Los abogados de la familia de Townsend señalaron en la demanda que artistas como Boyz II Men han hecho popurrís mezclados perfectamente de las dos canciones, y que incluso el propio Sheeran ha hecho la transición a “Let’s Get It On” durante presentaciones en vivo de “Thinking Out Loud”.
Intentaron reproducir un video de YouTube, potencialmente condenatorio, de una de esas actuaciones de Sheeran para el jurado en el juicio. Stanton negó su moción para incluirlo, pero dijo que lo reconsideraría después de ver otras pruebas presentadas.
Los herederos de Gaye no están involucrados en el caso, aunque inevitablemente tendrá ecos de su exitosa demanda contra Robin Thicke, Pharrell Williams y T.I. sobre el parecido de su éxito de 2013 “Blurred Lines” con “Got to Give it Up” de Gaye de 1977.
Un jurado otorgó a los herederos de Gaye 7.4 millones de dólares en ese juicio, que luego un juez redujo a 5,3 millones, lo que lo convierte en uno de los casos de derechos de autor más importantes de las últimas décadas.
El sello discográfico de Sheeran, Atlantic Records y Sony/ATV Music Publishing, también se incluyen como demandados en el caso por “Thinking Out Loud”. En general, los demandantes en los juicios por derechos de autor suelen nombrar a múltiples demandados, aunque un juez puede eliminarlos a discreción. En este caso, la coautora de la canción de Sheeran, Amy Wadge, no fue demandada.
Townsend, quien también compuso el éxito doo-wop de R&B de 1958 “For Your Love”, fue cantante, compositor y abogado. Murió en 2003. Kathryn Townsend Griffin, su hija, es la demandante que encabeza el juicio.
Gaye ya era una superestrella de Motown en la década de 1960 antes de que su producción más adulta de la década de 1970 lo convirtiera en un gigante musical. Fue asesinado a tiros por su padre en 1984, cuando tenía 44 años, e intentaba intervenir en una pelea entre sus padres.
Los artistas más famosos a menudo se enfrentan a demandas que alegan plagio en canciones, pero casi todos llegan a acuerdos legales antes de ir a juicio, como lo hizo Taylor Swift recientemente con “Shake it Off”, que puso fin a una demanda que duró años y estuvo cerca de terminar en tribunales.
Pero Sheeran, cuyo estilo musical se basa en soul, pop y R&B, lo que lo ha convertido en blanco de demandas por derechos de autor, ha mostrado su disposición para ir a juicio. Hace un año, ganó una batalla de derechos de autor en Gran Bretaña por su éxito de 2017 “Shape of You”, y luego criticó lo que describió como una “cultura” de demandas infundadas, destinadas a sacar dinero de los artistas que buscan evitar los gastos de un juicio.
“Siento que acusaciones como esta son demasiado comunes ahora y se han convertido en una cultura en la que se hace una demanda con la idea de que un acuerdo legal será más barato que llevarlo a los tribunales, incluso si no hay base para la demanda”, dijo Sheeran en un video publicado en Twitter después del veredicto: “Es realmente perjudicial para la industria de la composición”.
La demanda de “Thinking Out Loud” también recuerda acusaciones anteriores en la música estadounidense y británica desde los primeros días del rock ‘n’ roll, el R&B y el hip-hop: un joven artista blanco que aparentemente se apropia del trabajo de un artista mayor negro, señalamientos que también se aplicaron a Elvis Presley y The Beatles, cuya música se basó en la de precursores negros.
“El señor Sheeran tomó descaradamente la música de un artista negro que no considera que valga la pena para una compensación”, dijo Ben Crump, un abogado de derechos civiles que representa a la familia Townsend pero que no está involucrado en el juicio, en una conferencia de prensa el 31 de marzo.
Dalton reportó desde Los Angeles.
AGM