▲ Entre otros motivos, el modisto se hizo famoso por vestir a las esposas de los presidentes rusos. En la imagen, en 2001, posa junto a una de sus creaciones en el Museo del Teatro Bolshoi.Foto Afp
Afp y Ap
Periódico La Jornada
Martes 2 de mayo de 2023, p. 8
Moscú. El célebre diseñador de moda ruso Viacheslav Slava Zaitsev, apodado por la prensa occidental El Dior rojo y El zar de la moda soviética y quien vistió a las primeras damas de su país falleció este domingo a los 85 años tras una larga enfermedad, informó su casa de moda a la Afp.
El modisto, que creó más de un millar de modelos, se dio a conocer por el estampado de sus vestidos, similar al de los coloridos chales tradicionales de su país. Puedo vestir a todo un desfile en la Plaza Roja
, declaró en 2017 a la Agencia France Presse, durante una entrevista.
Saltó a la fama en su patria, y hasta cierto punto en el mundo, cuando Raisa, la esposa del gobernante soviético Mijaíl Gorbachov, usó sus creaciones en la década de los 80 y principios de los años 90.
Gracias a la visibilidad de la pareja soviética, al programa de reformas conocido como Perestroika, y a un programa económico y político que suscitó esperanza, Zaitsev logró exhibir sus creaciones en París, Tokio y otras capitales del mundo.
Este año, festejó sus 85 años
, informó la cadena pública rusa Pervy Kanal. Dictó la moda soviética y rusa durante décadas, un innovador que no temió a los experimentos audaces.
En 1963, la revista francesa Paris Match lo apodó El Christian Dior soviético. Un cuarto de siglo después, en 1988, la revista Vogue se refirió a él como El zar de la moda soviética.
En 1962 prohibieron su primera colección de ropa de trabajo para obreras, compuesta, de faldas inspiradas en estampados florales de los chales tradicionales rusos y botas afelpadas de muchos colores, debido a colores demasiado vivos
que contrastaban con el día a día gris soviético, donde nadie debía distinguirse del resto
, según Zaitsev.
Vigilado por la KGB por sus contactos con diseñadores occidentales y su carácter extravagante, Zaitsev no estaba autorizado para salir del país, por lo que sus primeras colecciones viajaron al extranjero sin él.